Amor

Amo tu nombre, tu cara, el aroma de tu cuerpo,

amo el aire que respiras y el sabor de tus besos,

el roce de tus manos, el color del sol en tu pelo,

amo el sentir de tus abrazos, el calor de tus dedos,

la alegría de tu risa, tu voz, tu silencio y tu reflejo.

Amo compartir contigo el transcurrir del tiempo.

Amo las cosas sencillas que en tu vida se repiten,

amo tus ganas, tus manías, tus idas y venidas,

tus encuentros, tus tropiezos, tu sincero amor,

tu paciencia y tu respeto, amo tu vida, tu sexo,

amo el espacio que dejas, y el ansia de tu vuelta,

tu esencia y tu presencia, tu aire de niña buena,

amo tu mirada en mi rostro, tu sonrisa, mi todo.

En guerra

...el soldado pudo distinguir claramente entre tanto alboroto el sonido de su bala. Pudo sentir el acerado proyectil entrando en su carne y una sensación de desasosiego que lo invadía; no dolió, solo un frío pavor empezó a escalar sus piernas, temblaban y una densa humedad crecía por momentos en sus entrañas. Parecía que algo se había roto y su primer pensamiento fue para ella: "Dios mio, mi mujer me mata".

Sola

Te diría que no te añoro como ayer, pero...
mientras te siento a manos llenas
mientras te clavas en mi pecho
mientras te vuelves mi único recuerdo
yo te intuyo a cada paso
y te oigo murmurar en mis adentros.

Y te veo en el silencio de esta noche
y te huelo a bocanadas
te busco, sin saber y sin pensar
te pinto entre borrones
te escribo sin permiso ni piedad,
y te espero.

Y mientras lucho en esta triste soledad
te fraguo en mi memoria
te quiero sin caballo ni armadura
te creo sin recelo ni maldad
te atisbo entre la bruma,
y te anhelo.

Y mientras te sueño entre algodones
te adueñas de mi sueño
y en la corta lejanía de esta dulce pesadilla
yo te amo a borbotones
y no estás,
y te siento.

¡Tu sabes! (de Fini López)

Te descubro mirando el horizonte
con esa melancolía que te acompaña
instalada en tu vida.
Te descubro momentos de embeleso
por la mueca de tu boca sonriente
y esas lágrimas que tienen dueña,
donde las miradas alimentan el alma.
Como adolescente enamorado
te gana el rubor la partida.
Te descubro en la arena inerte,
tus labios se cubrieron de sal con la brisa
y tus ojos se llenan del azul del mar
pero tu cuerpo quedó sin calor 
en compañía del triste desamor…
¡No quiso retenerte!
Tú sabes…tú entiendes…

(tuhablayoteamo.blogspot.com)

Ven

             

                Ven, desnúdate despacio
                como sin querer,
                y ávido de caricias 
                volveré a la vida
                navegando entre tus pechos.

                Deja que mis sentidos te busquen
                perdidita entre mis piernas                 
                mientras al arrancarte la ropa
                juntos descubrimos
                tus carnes rendidas
                al calor de mi boca.
             
                No pronuncies mi nombre
                y como dos desconocidos
                entre las sábanas y el cielo
                despertaremos al alba
                enredados en tu pelo.

Una fan, Mick y su ego

Era imposible intentar no seguir el ritmo de sus caderas, la cadencial dejadez de unos movimientos estudiados, perfectamente calculados tras cientos de conciertos y desde la primera fila de alocadas fans mis ojos ansiaban descansar en sus pupilas, dejarse llevar por el frenesí de sus balbuceos. Hacía muchos minutos que no conseguía oír el febril sonido, la música se había evaporado ante la imagen del dios del rock, ante la figura de aquél que parecía un hombre, felino, pero hombre al fin y al cabo y que sin embargo era capaz de provocar en mí un orgasmo con solo una sutil y morbosa mirada. Corría de un lado al otro del escenario, completamente solo, o quizás solo podía verle a él, sin darse tregua, salvo para enviarme de nuevo otra de aquellas miradas y de nuevo volvía a brotar en mi la lascivia, el incontenible deseo de tocarme, de aliviar aquel fuego que ardía en mi interior, ya no sabía, no podía y tampoco quería controlar mis orgasmos públicos y uno tras otro me fueron abandonando, mientras me miraba una y otra vez riéndose desde su púlpito, sabiéndose poderoso.

Eres tu

Eres la palabra mas linda

la suave caricia

en la piel mas tersa

eres madre desprendida 

mujer de vientre generoso

madre naturaleza

eres sol en mi mañana

ojos claros y risa fresca

eres luna en la noche

luz que me guía 

en esta sinuosa senda

ángel que bajo del cielo

eres mi salvaguarda 

mi verso y mi prosa

eres la letra que alivia 

tanta música incolora

eres dulce melodía 

en esta vida silenciosa

eres prisa en el camino

pan de cada día

eres como un hondo suspiro

como brisa cristalina

eres el aire que respiro

eres verso en el silencio

el transitar tranquilo

por este movido universo

eres la risa que todo lo llena

la alegría de mis ojos

eres el contoneo y el cuerpo

la carne y el deseo

eres el mas dulce remedio

la estela de mi vida

eres mujer, eres divina.

Leonid Afremov / Pinturas

http://leonidafremov.deviantart.com/gallery/

Leonid Afremov nació en 1955 en la ciudad de Vitebsk, Bielorrusia, en el mismo lugar en el que nació Marc Chagall, el famoso artista que fundó la Escuela de Arte de Vitebsk junto con Malevich y Kandinsky y donde el propio Afremov se graduó en 1978, siendo hoy uno de sus miembros de élite. El artista tiene su propio y único estilo, no utiliza pinceles para pintar, solo una espátula. Originales, luminosos y coloridos sus paisajes del campo, la ciudad y sus personajes han sido aclamados mundialmente. En 1990 se fue a Israel, donde vivió varios años y de donde se mudó a su hogar actual en Boca Raton, Florida.

Leonid Afremov en sus propias palabras : “ He probado diferentes técnicas durante mi carrera, sin embargo me enamoré de la pintura de aceite aplicada con espátula. Cada obra de arte es el resultado de un largo proceso, cada lienzo va naciendo durante la búsqueda creativa de la obra, cada pintura está llena de mi mundo interior. 

Yo creo que el arte nos ayuda a liberarnos y le da paz a nuestro espíritu.”

Solo espero

Cae la tarde y hay demasiado mundo entre tu boca y mi boca
y aún viven entre mis manos las caricias no dadas
aún resuenan en mi mente palabras no olvidadas
sigue lloviendo en mi cuarto y esta pesada carga su peso no agota
sigo esperando tu risa entre bastidores y desconsuelos
y entre idas y vaivenes, a la oscuridad de esta noche
solo espero, mientras mi corazón cierra por duelo.

Cae la noche y atento escucho el silencio de tus voces
y aunque quiera olvidarme de tu anhelada boca
aunque pueda refugiarme entre los muchos reproches
sigue lloviendo en mi cama y esta pesada carga su peso no agota
sigue sobrando este invierno que a empujones se encona
y ante un abismo que se abre entre tu llanto y mi ansia
solo espero, mientras huracanes mi alma azotan.

Hombre

"El hombre, ese ser animado que se alimenta, se desplaza y se comunica aunque sea poco y mal, que incluso es capaz de relacionarse y tomarse alguna copa pero siempre mientras sueña con la profundidad de tu escote."